ACTIVIDAD 6. ENTREVISTAS
Preguntar:
interrogar o hacer preguntas a alguien para que diga y responda lo que sabe
sobre un asunto.
Cuestionar: controvertir un punto dudoso, proponiendo las razones,
pruebas y fundamentos de una y otra parte.
El pasado miércoles 16 de enero, los alumnos de Lenguaje y Documentación tuvimos la oportunidad de trabajar con la
periodista Laura Bayarri, la cual nos expuso las pautas a seguir para realizar
una entrevista.
El primer paso antes de comenzar dicha actividad
es elegir qué tipo de entrevista queremos hacer conociendo las propiedades de
cada una. Después, debemos elegir al entrevistado y documentarnos sobre él para
poder preparar un buen cuestionario, teniendo en cuenta el tiempo del que se
dispone y el lugar donde transcurrirá.
Existen dos tipos de entrevista: la objetiva y la
de perfil. La primera es de estilo directo y no caben opiniones del periodista,
pero debe tener una entradilla donde se enmarque al personaje. La segunda
presenta una amplia libertad formal; para el estilo directo, se hace un uso de
las comillas, también se realizan descripciones del personaje y del ambiente en
que se desarrolla la misma.
El tiempo máximo para realizar una entrevista suele ser
de treinta minutos, lo cual nos permitirá hacer aproximadamente veinte
preguntas, que deben ir ordenadas de menor a mayor complejidad. No obstante, este orden puede variarse al elaborar el escrito, si así se considera conveniente.
Para preparar esta actividad debemos sentirnos
verdaderos periodistas. Debemos ser capaces de preguntar y cuestionar a la vez sin sugerir las respuestas,
hasta que el entrevistado responda la pregunta que le has hecho, aunque sin ser
irrespetuoso, y hasta que entrevistado nos ofrezca un titular; además, debemos tener auténtica curiosidad, sin miedo a parecer ignorantes,
y por último, pero no de menor importancia, debemos respetar el off de record, que no es más que aquellas cosas que nos revela el
entrevistado pero que no podrán ser publicadas.
Al terminar
nos dio dos consejos que nos serán de mucha utilidad al
realizar la entrevista. El primero fue que no nos ciñamos nunca a las preguntas
que llevemos preparadas, porque en un determinado momento puede surgir cualquier
otra que también nos aporte datos interesantes, y porque tal vez su respuesta esté incluida en lo que ya nos ha contado el entrevistado. El segundo fue
no olvidar la obligación de "desmontar el yo entrevistable, el alter-ego que se inventan ciertas personas
cuando son entrevistadas” (Thomas
Morgan), de ir más allá de la imagen que el entrevistado quiera dar para ofrecer su verdadero perfil.
Por cierto, Bea, quizás estuviera bien enviarlo a Gente26
ResponderEliminarBea, te facilito el correo: gente26instituto@gmail.com
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